21 octubre 2025
Iniciar un proyecto constructivo en zonas como Pérez Zeledón o Dominical implica cumplir con una serie de trámites esenciales adaptados a cada zona. Estos pasos, aunque necesarios para garantizar la legalidad y seguridad del proyecto, pueden extenderse si no se gestionan correctamente desde el principio.
Además de asegurar el cumplimiento normativo, los trámites permiten coordinar aspectos técnicos, ambientales y administrativos que afectan directamente la viabilidad y el ritmo de la construcción. Por esta razón, entender las etapas del proceso y aprovechar estratégicamente las temporadas climáticas puede marcar una diferencia significativa en el desarrollo de la obra.
Etapas esenciales del trámite constructivo
Antes de colocar la primera piedra, es obligatorio pasar por distintas fases que aseguran que el terreno, el diseño y la ejecución cumplan con la normativa vigente. Entre los principales pasos destacan:
- Estudios preliminares: Incluyen la adquisición del lote, la verificación de la inscripción en el Registro Nacional, y la revisión de normativa y disponibilidad de servicios como agua, luz y acceso. También se realiza un análisis físico del sitio y estudios técnicos como impacto ambiental, geotécnico y curvas de nivel.
- Planos constructivos: Una vez concluida la fase previa, se elaboran los planos que deberán ser aprobados por el CFIA, entidades correspondientes (como el MINAE si aplica) y la municipalidad. Este proceso incluye la presentación de formularios oficiales como D1, D2 y D3, así como el pago de pólizas y seguros.
- Permiso de construcción: Con todos los planos aprobados y sellados, se tramita el permiso municipal. Este paso incluye el pago de derechos municipales y constituye el punto de partida legal para el inicio de la obra.
- Ejecución y supervisión de obra: Durante esta etapa se controlan aspectos como la seguridad social, el pago de planilla, las inspecciones técnicas (estructurales, electromecánicas, arquitectónicas) y la gerencia de proyecto.
- Cierre de obra: Al finalizar la construcción, se gestionan certificaciones clave como el acta de fin de obra, la aceptación final y la finalización de la bitácora. También se documentan las garantías y pólizas requeridas.
¿Cuánto puede durar este proceso?
La duración de los trámites varía según el tipo de proyecto, ubicación y cantidad de instituciones involucradas. En promedio, el proceso completo puede tardar entre 3 y 6 meses, aunque en proyectos más complejos puede extenderse hasta un año. Realizar trámites de construcción suelen enfrentarse a cuellos de botella por alta demanda, especialmente en temporada seca, cuando aumentan las solicitudes.
Una forma de contrarrestar estos retrasos es iniciar la tramitología durante la temporada lluviosa. En estos meses disminuye la cantidad de obras activas, lo que se traduce en menor carga para las instituciones reguladoras. Así, cuando llega el verano, el proyecto ya cuenta con todos los permisos y puede ejecutarse sin contratiempos.
¿Por qué elegir Arkcon para gestionar sus trámites?
En Arkcon nos encargamos de todo el proceso de tramitología para que usted no tenga que preocuparse por gestiones lentas o complicadas. Contamos con amplia experiencia en trámites de construcción, lo que nos permite anticipar requisitos, preparar documentación completa y mantener una relación eficiente con las instituciones involucradas.
Conocemos a fondo la normativa local y aplicamos estudios de fotogrametría con dron permitiéndonos conocer las condiciones específicas del terreno, por lo que adaptamos cada diseño de manera estratégica para evitar rechazos o atrasos. Desde los estudios preliminares hasta la entrega final de la obra, ofrecemos un acompañamiento integral que asegura cumplimiento, calidad y eficiencia.
Sabemos cuándo es el mejor momento para iniciar los trámites y cómo optimizar cada paso del proceso. Gestionar con nosotros significa ahorrar tiempo, reducir riesgos y avanzar con confianza hacia la construcción de su proyecto. ¡Contáctenos para más información!